Con más de 40 años de trayectoria artística y más de 30 millones de discos vendidos, Pimpinela se ha consolidado como uno de los dúos más emblemáticos de la música latina.
Formado por los hermanos Lucía y Joaquín Galán, este dúo argentino ha marcado un antes y un después gracias a su estilo único que combina música con teatro, creando historias dramáticas de amor, desamor y conflictos familiares que han conectado profundamente con su público.
A lo largo de cuatro décadas, Pimpinela ha recibido más de 100 discos de oro, platino y diamante, reflejo del impacto y la fidelidad de sus seguidores.
Lucía y Joaquín Galán nacieron en Buenos Aires, Argentina, pero desde pequeños viajaban a España donde visitaban a su familia.
Su madre fue la principal impulsora para que comenzaran a cantar juntos, aunque al principio la idea no fue del todo bien recibida por los adolescentes.
Sin embargo, la insistencia materna les llevó a probar y descubrir una química artística que los unió para siempre.
Durante uno de sus viajes a España, conocieron al cantautor Luis Aguilé, quien los recomendó al sello CBS (hoy Sony Music Entertainment), lo que marcó el inicio oficial de Pimpinela como dúo.
El nombre “Pimpinela” proviene de una flor caribeña hermafrodita, que simboliza la dualidad y complementariedad, algo muy representativo de la relación entre los hermanos.
Desde principios de los años 80, Pimpinela destacó por su forma innovadora de componer e interpretar canciones.
Su música no solo era melódica, sino que incluía elementos teatrales, con diálogos y dramatizaciones que reflejaban conflictos amorosos y familiares cotidianos.
Esta combinación de música y teatro los hizo únicos y les permitió conectar emocionalmente con su audiencia.
Las letras de sus canciones surgían de experiencias personales y de la observación de la vida misma.
Lucía aportaba la teatralidad y la voz femenina, mientras que Joaquín se encargaba de la composición y la voz masculina, creando un balance perfecto que enriquecía cada interpretación.
En 1981 lanzaron su primer disco, “Las primeras golondrinas”, pero fue en 1982 con su segundo álbum homónimo cuando comenzaron a alcanzar verdadera fama, especialmente con la canción “Olvídame y pega la vuelta”, que se convirtió en un himno del desamor y la reconciliación.
Este tema marcó un quiebre en su carrera y definió el estilo dramático y dialogado que los caracterizaría.
A lo largo de los años 80, Pimpinela lanzó varios álbumes exitosos como “Hermanos” (1983), “Convivencia” (1984), y “El duende azul” (1986), consolidando su presencia en América Latina y ganando reconocimientos importantes como la Antorcha de Plata en el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar.
Aunque su carrera artística fue brillante, la relación entre Lucía y Joaquín no estuvo exenta de tensiones.
Muchas veces subieron al escenario estando peleados, pero siempre lograron mantener un profundo respeto y cariño mutuo que les permitió seguir trabajando juntos durante tantos años.
Lucía tuvo una relación muy mediática con el futbolista Diego Armando Maradona, aunque ella misma ha preferido mantener en privado detalles sobre esta etapa.
Joaquín, por su parte, se casó con la artista plástica Viviana Berco, con quien tiene un hijo llamado Francisco.
En los años 90, Pimpinela decidió cambiar su imagen y estilo, buscando una propuesta más relajada y menos dramática.
A pesar de este giro, mantuvieron su esencia teatral y la conexión con su público.
Durante esta década, lanzaron álbumes como “Hay amores y amores” (1990), “10 años después” (1991), y “Hay amores que matan” (1993), que incluyó colaboraciones con artistas como José José.
También incursionaron en nuevos géneros y formatos, lanzando álbumes en vivo, recopilaciones y versiones de éxitos italianos que ampliaron su alcance internacional.
Su capacidad para adaptarse y evolucionar sin perder su identidad fue clave para mantenerse vigentes.
Además de su carrera musical, Pimpinela ha mostrado un fuerte compromiso social.
En 1996 abrieron el Hogar Pimpinela para la niñez, atendiendo las necesidades de niños en situación vulnerable.
Este proyecto refleja los valores y la sensibilidad que siempre han acompañado a los hermanos Galán.
La familia es un pilar fundamental para ellos.
Lucía es madre de Rocío, y Joaquín es padre de Francisco; ambos han destacado por apoyar y acompañar a sus hijos en sus propios caminos artísticos.
A lo largo de su carrera, Pimpinela ha recibido numerosos premios y reconocimientos, incluyendo el Premio Carlos Gardel a la trayectoria artística.
Su discografía incluye más de 30 álbumes, con éxitos que han trascendido generaciones, como “Olvídame y pega la vuelta”, “Valiente”, “Ahora me toca a mí” y “Son todos iguales”.
En 2017 publicaron su libro autobiográfico “Hermanos: La verdadera historia”, donde revelan detalles íntimos de su vida personal y artística, mostrando la complejidad de una relación fraternal que ha sido la base de su éxito.
En los últimos años, Pimpinela ha mantenido su relevancia con nuevos lanzamientos y presentaciones en vivo, incluyendo conciertos con orquestas y colaboraciones con artistas más jóvenes.
En 2016 lanzaron el álbum “Son todos iguales”, que incluye duetos con cantantes como Ángela Leiva y Luciano Pereira.
También han participado como jurados en programas de televisión y continúan siendo un referente de la música latina, con una base sólida de seguidores que los acompaña desde sus inicios.
La historia de Pimpinela es la historia de dos hermanos que, a pesar de sus diferencias y conflictos, lograron construir una carrera musical única y exitosa basada en la autenticidad, la pasión y el talento.
Su estilo innovador que mezcla música y teatro ha dejado una huella imborrable en la música latina, y su legado seguirá vivo a través de sus canciones y la influencia que han tenido en generaciones de artistas y fans.
Pimpinela no solo es un dúo musical, sino un fenómeno cultural que ha sabido contar las historias del amor, el desamor y las relaciones humanas con una sinceridad y dramatismo que pocos han logrado igualar.
Su vida y obra son un testimonio de perseverancia, amor fraternal y compromiso con su arte y su público.
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