💔🔥 Detrás de los Grammy: El Infierno Secreto que Tina Turner Soportó en Silencio
Tina Turner parecía tener la vida perfecta: una carrera increíble que abarcó décadas, ocho premios Grammy, un esposo maravilloso en sus últimos años, y una multitud de admiradores.
Sin embargo, debajo de esa vida aparentemente ideal, había mucho que Tina estaba ocultando.
Tras su fallecimiento hace casi un año, su esposo Erwin Bach ha comenzado a hablar sobre las luchas que Tina enfrentó en los años previos a su muerte, y algunas de sus confesiones te dejarán sorprendido.
La vida de Tina Turner es aún más trágica e increíble de lo que muchos imaginan.

Tina Turner nació como Anna Mae Bullock el 26 de noviembre de 1939 en Nutbush, Tennessee.
Sus padres trabajaban como aparceros y ella pasó sus primeros años recogiendo algodón junto a ellos.
Sin embargo, cuando comenzó la Segunda Guerra Mundial, sus vidas dieron un giro dramático.
Sus padres encontraron trabajos en una fábrica de defensa en Knoxville, pero tomaron la difícil decisión de dejar a Tina y a sus dos hermanas al cuidado de sus estrictos abuelos religiosos.
La separación fue dolorosa, y Tina no vería a sus hermanas durante años.
Fue solo al final de la guerra en Europa que la familia se reunió, pero la experiencia más dolorosa de su infancia aún estaba por llegar.
A la edad de 11 años, Tina sufrió un trauma profundo cuando su madre abandonó a la familia, escapando de una relación abusiva.
Este abandono dejó a Tina sintiéndose no deseada y profundamente herida.
La vida de Tina continuó llena de tumulto en su adolescencia.
Dos años después de que su madre se fuera, su padre se volvió a casar y dejó a los niños atrás.
Tina y sus hermanas fueron enviadas a vivir con su otra abuela en Brownsville, Tennessee.
Allí, Tina comenzó a valerse por sí misma, trabajando como empleada doméstica mientras vivía con su abuela.
A los 16 años, Tina enfrentó otra tragedia: su media hermana Evelyn y dos primos murieron en un accidente automovilístico.
Este evento marcó el comienzo de una serie de pérdidas que darían forma a su futuro.
En el funeral de su abuela, Tina se sorprendió al encontrar a su madre, quien había abandonado a la familia años antes.
Su madre pidió a Tina y a su hermana que se mudaran a St. Louis, lo que llevó a Tina a dejar atrás su vida en el pequeño pueblo y abrazar las luces brillantes de la gran ciudad.

Durante sus años en St. Louis, Tina comenzó a frecuentar clubes nocturnos y un momento crucial ocurrió cuando conoció a Ike Turner y su banda, los Kings of Rhythm.
A pesar de que el grupo no tenía miembros femeninos, Tina estaba decidida a cantar con ellos.
Después de que Ike inicialmente desestimara su solicitud, Tina tomó la audaz decisión de subirse al escenario y cantar una balada de blues de B.B.King.
Su electrizante actuación impresionó a Ike, quien la invitó a unirse a su banda.
A pesar de que Ike y Tina no comenzaron su relación romántica de inmediato, eventualmente se involucraron.
Tina se encontró embarazada de su primer hijo, Craig, a los 18 años, lo que llevó a una serie de complicaciones en su vida personal.
Después de ser echada de casa por su madre, Tina se mudó con Raymond Hill, el padre de su hijo, pero pronto se encontró sola nuevamente cuando él la abandonó.
La relación de Tina con Ike se volvió tumultuosa y abusiva.
Ike era un hombre controlador y violento, y Tina soportó años de abuso físico y emocional.
Su primer gran indicio de que su matrimonio no sería un cuento de hadas llegó cuando Ike insistió en que se casaran en una ceremonia sórdida en Tijuana, donde la llevó a un burdel.
A pesar de los éxitos que alcanzaron juntos, la vida personal de Tina era un caos.
El abuso de Ike se intensificó, y Tina a menudo se presentaba en el escenario con moretones y heridas.
En 1968, después de una violenta pelea, Tina intentó suicidarse con una sobredosis de Valium.
Aunque sobrevivió, este incidente le proporcionó claridad sobre su situación y reforzó su determinación de escapar.
En 1976, después de años de abuso, Tina finalmente dejó a Ike.
Su divorcio fue un proceso complicado y doloroso, pero Tina logró recuperar su nombre y su identidad.
Sin embargo, el camino hacia el éxito no fue fácil.
Tina se encontró en el fondo, luchando por sobrevivir como madre soltera y dependiente de la música.
A pesar de sus dificultades, su talento y determinación la llevaron a un regreso monumental.
En 1984, Tina lanzó el álbum Private Dancer, que catapultó su carrera a nuevas alturas.
La canción “What’s Love Got to Do with It” se convirtió en un éxito mundial, y Tina se estableció como una de las estrellas más prominentes en la historia del rock.
Su estilo único, energía electrizante y actuaciones cautivadoras la convirtieron en un ícono.
A pesar de su éxito, Tina enfrentó más desafíos en sus últimos años.
En 2013, renunció a su ciudadanía estadounidense y se mudó a Suiza, donde encontró la paz y la felicidad junto a su esposo Erwin Bach.
Sin embargo, su vida estuvo marcada por tragedias, incluida la muerte de su hijo Craig en 2018.
Tina continuó luchando contra problemas de salud, incluyendo un derrame cerebral y cáncer intestinal.
A pesar de estos desafíos, su espíritu indomable nunca se apagó.
En sus últimos años, disfrutó de una vida tranquila, rodeada de amor y apoyo.

Tina Turner fue una verdadera luchadora, enfrentando adversidades inimaginables y convirtiéndose en un ícono global.
Su historia es un testimonio de resiliencia y fuerza, y su legado sigue inspirando a millones.
A medida que reflexionamos sobre su increíble vida, es reconfortante escuchar a su esposo Erwin compartir su historia y las luchas que enfrentó.