El Panteón Español de la Ciudad de México alberga la tumba de uno de los actores más queridos y emblemáticos de México y Latinoamérica: Mario Moreno Reyes, mejor conocido como Cantinflas.
En un reciente video del canal Real Belén, se realiza un recorrido por este histórico cementerio y se muestra cómo está sepultado este gran comediante, cuya influencia trasciende generaciones y fronteras.
Mario Moreno Cantinflas nació el 12 de agosto de 1911 en la Ciudad de México.
Antes de convertirse en una leyenda del cine, trabajó en diversos oficios, desde taxista hasta torero cómico, hasta que finalmente encontró su vocación en el teatro de carpa, donde desarrolló su característico estilo verbal.
Su humor único y su personaje del “peladito” — un mexicano humilde, ingenioso y sin estudios formales — lo convirtieron en un símbolo del pueblo.
Su estilo de hablar, conocido como “cantinflear”, fue tan influyente que en 1992 la Real Academia Española incorporó el verbo “cantinflar” para describir el acto de hablar mucho sin decir nada concreto, una sátira que Cantinflas usaba para criticar la burocracia y la política.
La carrera de Cantinflas despegó con la película “Ahí está el detalle” en 1940, seguida por otros éxitos como “Sangre y arena”, “El gendarme desconocido”, “El bolero de Raquel”, “El padrecito” y “El barrendero”.
En todas sus películas, interpretaba a personajes sencillos que, con ingenio y humor, resolvían situaciones complejas, ganándose el cariño del público.
Fuera de la pantalla, Cantinflas fue un filántropo comprometido con ayudar a los más necesitados.
Se casó con la actriz Valentina Ivanova y adoptó a un hijo, Mario Arturo Moreno Ivanova.
Su legado social es tan importante como su contribución al cine.
El Panteón Español, inaugurado en 1886 para la comunidad española que vivía en la Ciudad de México, es un cementerio de estilo gótico neoclásico, con tumbas y mausoleos que reflejan la historia y arquitectura de la época.
La tumba de Cantinflas se encuentra en un sótano accesible por una escalera tras unas puertas metálicas, un detalle poco común que la hace aún más especial.
En la lápida se pueden ver numerosas fotografías del actor, desde su juventud hasta momentos destacados de su vida, incluyendo una imagen junto al famoso futbolista brasileño Pelé.
También hay flores, dulces y otros objetos que los seguidores le dejan como muestra de respeto y admiración.
La tumba tiene una gran cruz amarilla pintada en la parte superior, y está rodeada de construcciones antiguas que forman parte de este histórico panteón.
Una de las sorpresas del video es la presencia de una mata de mandarinas justo sobre una tumba cercana a la de Cantinflas.
La planta está llena de frutos maduros, lo que llama la atención por estar en un cementerio.
El narrador se pregunta por qué los trabajadores del panteón no las comen, y propone a los espectadores comentar si se atreverían a probarlas.
Este detalle aporta un toque de vida y naturaleza en medio del ambiente solemne del cementerio, mostrando que la memoria y el homenaje pueden coexistir con la naturaleza.
Cantinflas no solo es recordado por sus películas y su estilo único, sino también por su influencia cultural y social.
Fue reconocido en vida por figuras internacionales como Charles Chaplin, quien lo consideró el mejor comediante vivo de su época.
Su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood es testimonio de su impacto global.
A pesar de su fallecimiento el 20 de abril de 1993 a causa de cáncer pulmonar, su figura sigue viva en la memoria de millones.
Su tumba es visitada constantemente por admiradores que llevan flores y objetos en su honor, manteniendo vivo el legado de un hombre que supo hacer reír y reflexionar a través del humor.
El Panteón Español no solo es un lugar de descanso para Cantinflas, sino también un espacio que refleja la historia de la Ciudad de México y su comunidad española.
Con más de un siglo de antigüedad, sus construcciones y estilo arquitectónico son un patrimonio cultural que merece ser conocido y preservado.
El recorrido por este panteón, como el que realiza el canal Real Belén, invita a reflexionar sobre la importancia de honrar a quienes han dejado una huella en la sociedad, y a valorar la historia que se encuentra en cada rincón de la ciudad.
Visitar la tumba de Cantinflas es más que un acto de homenaje; es un viaje al corazón de la cultura mexicana y latinoamericana.
A través de su vida, obra y memoria, Cantinflas sigue inspirando a nuevas generaciones con su humor, humanidad y compromiso social.
El video de Real Belén nos ofrece una mirada íntima y respetuosa a este lugar sagrado, recordándonos que detrás de cada leyenda hay una historia de vida que merece ser contada y celebrada.
