En el mundo de la realeza británica, las historias de amor y desamor a menudo están envueltas en un manto de intriga y misterio.
Uno de los relatos más fascinantes en los últimos años ha sido el de Meghan Markle y su relación con la familia real.
Recientemente, la columnista británica Ingrid Stuart ha publicado un libro titulado *My Mother and I*, que ofrece una visión profunda sobre la vida de Meghan y su interacción con la monarquía, especialmente con el difunto Príncipe Felipe.
Desde el primer encuentro entre Meghan Markle y la Reina Elizabeth II, la monarquía parecía abrirle las puertas a la actriz estadounidense.
La Reina no solo aprobó a Meghan, sino que también vio en ella un potencial para revitalizar la imagen de la familia real ante la juventud de la Commonwealth.
Sin embargo, no todos compartían este optimismo.
El Príncipe Felipe, conocido por su carácter directo y a menudo mordaz, fue uno de los pocos que mostró recelo hacia Meghan.
Philip advirtió a la Reina que tuviera cuidado con Meghan, señalando que había algo en ella que le recordaba a Wallis Simpson, la Duquesa de Windsor.
Este comentario no era simplemente superficial; llevaba consigo una carga emocional y un trasfondo histórico significativo.
La historia de Wallis Simpson, quien causó una ruptura en la familia real británica al casarse con el Rey Eduardo VIII, sigue siendo un tema delicado en la historia de la monarquía.
Wallis Simpson, una mujer estadounidense divorciada, se convirtió en la esposa de Eduardo VIII, quien abdicó del trono para poder casarse con ella.
Este acto de amor tuvo repercusiones duraderas en la familia real, provocando tensiones y divisiones que perduraron durante generaciones.
La Reina madre nunca perdonó a Wallis, a quien consideraba una “bruja malvada”, y la familia real se vio marcada por la decisión de Eduardo de priorizar su amor por encima de sus deberes reales.
La comparación entre Meghan y Wallis no solo se basa en su origen estadounidense y su estado civil, sino que también refleja las preocupaciones de una familia que ha sido herida por el amor en el pasado.
La Reina, consciente de la historia y de los peligros que conlleva, pudo haber comprendido la inquietud de Felipe al trazar paralelismos entre ambas mujeres.
Ingrid Stuart detalla en su libro que la Reina nunca expresó públicamente su verdadero sentir sobre Meghan, salvo en conversaciones privadas con sus confidentes más cercanos.
Por ejemplo, se dice que la Reina comentó sobre el vestido de novia de Meghan, señalando que era “demasiado blanco” para una mujer divorciada que se casaba nuevamente en la iglesia.
Esta observación revela una mentalidad tradicional que todavía persiste en algunas esferas de la familia real.
Además, la decisión del Príncipe de Gales, Carlos, de llevar a Meghan al altar en lugar de su padre, Thomas Markle, también generó preocupación en la Reina.
Ella temía que estas decisiones pudieran tener repercusiones negativas en la percepción pública de la monarquía.
La boda de Harry y Meghan fue un evento mediático que atrajo la atención del mundo entero.
Sin embargo, tanto la Reina como Felipe se sintieron incómodos durante la ceremonia.
El arzobispo estadounidense Michael Curry, quien pronunció un sermón prolongado, fue un punto de controversia.
La Reina y Felipe, que no eran aficionados a los discursos largos, se sintieron desesperados por el final del sermón.
A medida que la relación de Harry y Meghan se desarrollaba, las tensiones aumentaron.
La decisión de Harry de renunciar a sus deberes reales y mudarse a Estados Unidos fue un punto de quiebre.
La Reina, según se informa, nunca entendió completamente esta decisión, lo que llevó a un deterioro en la relación entre Harry y su familia.
La infame entrevista de Harry y Meghan con Oprah Winfrey marcó un antes y un después en la percepción pública de la familia real.
Durante la entrevista, Harry insinuó que la familia real era racista, lo que causó una gran conmoción.
La Reina, que había pasado 70 años preservando la institución de la monarquía, se sintió profundamente molesta por la forma en que Harry habló de su familia.
Este momento fue crucial, ya que llevó a la Reina a decidir que ya no tenía sentido preocuparse por Harry, quien parecía más interesado en su esposa que en las tradiciones familiares.
La comparación de Meghan con Wallis Simpson probablemente pasó por la mente de la Reina en esos momentos de incertidumbre.
El libro de Ingrid Stuart también explora la compleja relación entre Harry y su hermano William.
Desde pequeños, ambos hermanos han tenido una dinámica de competencia.
Harry, sintiéndose a menudo como “el repuesto”, ha luchado con su identidad dentro de la familia real.
La presión sobre William, el heredero, ha sido igualmente intensa, y la relación entre los dos hermanos se ha visto afectada por sus respectivas experiencias y expectativas.
Harry ha expresado su frustración por sentirse menospreciado en comparación con William, lo que ha llevado a un resentimiento que ha crecido con el tiempo.
Esta rivalidad, combinada con las tensiones familiares, ha creado un ambiente complicado que ha sido difícil de navegar para todos los involucrados.
El libro de Ingrid Stuart ofrece una mirada fascinante a la vida de Meghan Markle y su relación con la familia real británica.
A través de las comparaciones con Wallis Simpson y el análisis de las dinámicas familiares, se revela un retrato complejo de una mujer que ha desafiado las normas y expectativas de la realeza.
La historia de Meghan es un recordatorio de que, incluso en el mundo de la monarquía, el amor y las decisiones personales pueden tener consecuencias profundas y duraderas.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Hola qué tal Buenos días buenas tardes buenas noches Este es tu amigo Tony miskatonic y el tema de hoy es un nuevo libro con información interesante Así es mis estrellas la columnista británica Ingrid Stuart ha escrito un nuevo libro titulado my mother And I algo así como mi madre y yo a continuación un extracto que trata sobre Megan markle desde su primer encuentro mientras tomaban el té en el Palacio de buckingham la reina aprobó a Megan markle No solo le gustaba sino que tenía grandes en lo que la actriz estadounidense podría lograr con
00:33
Harry para la juventud de la commonwealth pronto el país en su conjunto pareció tomar a Megan con un deleite Igualmente Genuino sin embargo uno de los pocos que recelo de sucumbir a sus encantos fue el príncipe Felipe mientras la reina continuaba defendiendo a la enamorada de Harry el príncipe le advirtió a su esposa que fuera cautelosa el príncipe Felipe le dijo a la reina que era extraño lo mucho que Megan markle le recordaba a la la Duquesa de winsor a wallis Simpson el príncipe Felipe no se refería simplemente al
01:05
hecho de que ambas eran delgadas morenas y la amorosas divorciadas estadounidenses detrás del mordaz comentario del príncipe Felipe había una gran cantidad de subtexto Por así decirlo cuando ella tenía solo 10 años de edad el amado padre de la princesa Isabel se había convertido repentinamente en Rey después de que Eduardo vi más tarde Duque de quinor abdicar para casarse con wallis Simpson una divorciada est ense esto provocó una ruptura permanente en la familia real el nuevo rey Jorge vi se negó a recibirla y
01:36
le negó el tratamiento el apelativo de su alteza real por su parte la Duquesa estadounidense se burló abiertamente de la reina más tarde reina madre llamándola a la gorda cocinera escocesa más tarde la reina madre culpó a los tuques de winsor por la temprana muerte de su esposo causada según ella por el estrés de asumir el papel de Rey para el que temperamentalmente no estaba prepar parado nunca perdonó a la Duquesa a quien calificó de bruja malvada de malvada Hechicera desde el comienzo de la aventura de Eduardo con wallis
02:09
Entonces todavía casada había estado enamorado de ella hasta el punto de que pronto comenzó a descuidar sus deberes reales una vez cuando le pidió a wallis que le encendiera un cigarrillo ella respondió solo si lo pides bien momento en el que él se arrodilló y suplicó como un perro más tarde después de su matrimonio wallis había acompañado felizmente al Duque de winsor en 37 en una visita a la Alemania nazi durante la cual conocieron a Hitler Y ambos fueron fotografiados haciendo el saludo nazi como alguien que había vivido este
02:40
periodo tumultuoso de la historia real y se había visto directamente afectada por él la Reina Isabel II era perfectamente consciente de lo que Felipe quería decir cuando trazó paralelismos entre Megan y wallis de hecho mucho más tarde Isabel I comentaría a su manera entrecortada que tal vez Harry había estado demasiado enamorado de la actriz estadounidense en cuanto al príncipe Felipe nunca pareció cambiar de opinión sobre Megan desde el momento en que detectó su aparente similitud con wallis se refirió a ella
03:09
como do es decir d o Duquesa de winsor dashes of winsor la Reina Isabel I nunca expresó su verdadera opinión sobre la esposa de Harry Excepto a sus confidentes más cercanos como Lady Elizabeth hansson o Lisa como la conocían sus amigos prima de la reina solía hablar por teléfono con la Mon a diario Ingrid Stuart menciona en su libro Lady Elizabeth me dijo que la reina solo le había hecho un comentario sobre la boda de Megan y Harry que era que el vestido de novia de givenchi de la novia era demasiado blanco en opinión
03:44
de la monarca no era apropiado que una divorciada que se volviera a casar por la iglesia pareciera tan extravagantemente virginal la reina tampoco se sintió cómoda con la decisión del príncipe de gales de sustituir al padre de Megan Thomas markle y llevarla al altar también estaba preocupado opada por la decisión del príncipe Felipe de 96 años de caminar por el pasillo sin un bastón a pesar de haberse sometido a un reemplazo de cadera solo cco semanas antes luego estaba el servicio en Sí al igual que muchos otros miembros de la
04:13
congregación Isabel I se sorprendió por las apasionadas efusiones del arzobispo estadounidense Michael Cory que habló durante más de 14 minutos tanto la reina como el príncipe Felipe que odiaban los sermones largos estaban desesperados porque terminara también deben haber sido conscientes de que algunos de los que los rodeaban estaban reprimiendo su risa solo se puede especular sobre lo que pensaron cuando el arzobispo estadounidense cury quien admitió que no conocía ni a Harry ni a Megan dijo más tarde que había sentido la presencia de