En la época dorada del cine mexicano, cuando figuras como María Félix dominaban con mano firme y un aura casi intocable, surgió una joven actriz que desafió el poder de la “Doña” con una osadía sin precedentes.
Gloria Mange, una promesa radiante y elegante, no solo captó la atención del público y la prensa, sino que protagonizó un momento inolvidable que sacudió los cimientos de la industria: humilló públicamente a María Félix con una réplica aguda y sarcástica que dejó a todos atónitos.
Sin embargo, esta valentía le costó caro y su carrera se truncó abruptamente.
Esta es la historia de Gloria Mange, una estrella fugaz que brilló intensamente y decidió alejarse para siempre del espectáculo.
Gloria Mange nació en 1931 en Ciudad Obregón, Sonora, en un México que aún se reconstruía tras las secuelas de la Revolución Mexicana.
Creció en un ambiente donde la tradición y la modernidad se entrelazaban, y desde muy joven destacó por su belleza natural, elegancia y carisma.
A los 18 años ya era reina de eventos sociales, lo que anticipaba su futuro en el mundo artístico.
Su debut en el cine llegó en 1949 con un papel pequeño en *La señora Diabla*, pero pronto comenzó a obtener roles más relevantes.
En 1950 participó en películas como *Una mujer decente* y *La vida es una canción*, y su interpretación de Sarita en *Primero soy mexicano* fue un punto de inflexión que mostró su capacidad para conectar con el público más allá de su apariencia.
Su carrera despegó con fuerza cuando interpretó a Ruth, la prometida de Pedro Infante en *Esa mujer* (1951), un papel que le permitió demostrar su talento para expresar emociones complejas con sinceridad y profundidad.
Además, incursionó en la comedia al actuar junto a Cantinflas en *Si yo fuera diputado*, mostrando su versatilidad como actriz.
A principios de los años 50, Gloria Mange se encontraba en plena ascensión, ganando reconocimiento y admiración.
Sin embargo, su camino se cruzó con María Félix, la “Doña”, una diva consolidada y temida en la industria por su fuerte personalidad y poder.
En un evento social de alto perfil organizado por el empresario Jorge Pasquel, Gloria cautivó a la prensa y al público con su belleza y encanto, eclipsando momentáneamente a María Félix.
La tensión entre ambas creció y estalló en una fiesta taurina donde Félix, sintiéndose desplazada, atacó verbalmente a Gloria, descalificándola como una simple imitadora sin carisma.
La respuesta de Gloria fue rápida y brutal: con sarcasmo, comentó que las famosas pestañas de María Félix eran implantes de pelos de cerdo y se burló de su voz grave, comparándola con la de un hombre.
Este comentario provocó carcajadas en la audiencia y dejó a Félix humillada y desconcertada, quien se retiró llorando y jurando vengarse.
La osadía de Gloria Mange no pasó desapercibida, y según rumores de la época, María Félix utilizó su enorme influencia para boicotear la carrera de Gloria.
Se dice que Félix orquestó una especie de lista negra que impidió a Mange conseguir nuevos papeles, marginándola justo cuando su carrera comenzaba a florecer.
Este bloqueo silencioso, sumado a la presión de la industria, llevó a Gloria a tomar una decisión drástica: retirarse del cine a los 23 años, en la cúspide de su éxito.
Se mudó a Monterrey y optó por una vida privada lejos de los reflectores, dejando a sus admiradores con la sensación de un futuro prometedor truncado.
En 1954, Gloria se casó con Pablo Funtanet Martí, un empresario costarricense conocido por su participación en proyectos como el parque de diversiones Reino Aventura y el fraccionamiento Bosque Real.
Juntos tuvieron cuatro hijos y llevaron una vida tranquila y alejada del glamour de la pantalla grande.
Gloria se dedicó plenamente a su familia, convirtiéndose en esposa y madre entregada.
Aunque mantuvo un perfil bajo, su elegancia y belleza siguieron siendo recordadas por quienes la conocieron y admiraron.
Su hija Ana Funtanet Mange destacó como directora del centro comercial Plaza de las Estrellas y creadora del Paseo de las Luminarias, un tributo a las leyendas del entretenimiento mexicano.
Gloria Mange falleció el 8 de julio de 2023 en Ciudad de México a los 92 años, dejando atrás una vida marcada por el brillo fugaz del cine y la serenidad de la vida familiar.
Su muerte fue anunciada por el diputado Enrique Vargas del Villar, y aunque muchos detalles de sus últimos días permanecen en privado, se sabe que vivió de forma activa y plena.
Su patrimonio, ligado principalmente a los negocios inmobiliarios de su esposo, garantizó estabilidad para su familia.
Más allá del dinero, el verdadero legado de Gloria es su ejemplo de dignidad y elección de vida, optando por la privacidad y el amor familiar en lugar de la fama.
La historia de Gloria Mange es un reflejo de las complejidades y desafíos que enfrentaron muchas mujeres en la época dorada del cine mexicano.
Su valentía para desafiar a una figura tan imponente como María Félix la convirtió en una leyenda, aunque su carrera se viera truncada por las consecuencias de ese enfrentamiento.
Su vida demuestra que a veces las estrellas más brillantes eligen brillar en silencio, alejándose del espectáculo para encontrar su verdadera felicidad.
Gloria Mange no solo fue una actriz talentosa y versátil, sino también una mujer que supo priorizar su bienestar y su familia, dejando una huella imborrable en la memoria del cine mexicano.
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