Camilo Sesto fue uno de los cantautores más emblemáticos y prolíficos de la música en español, un verdadero genio y prodigio cuya voz y composiciones marcaron a varias generaciones.
Su carrera estuvo llena de éxitos, reconocimientos y momentos inolvidables, pero también atravesó dificultades personales y un triste final que conmocionó a sus seguidores.
Este artículo repasa la vida, la carrera y los últimos años de un artista que se convirtió en leyenda.
Camilo Blanes Cortés, conocido artísticamente como Camilo Sesto, nació en una familia humilde, hijo de Eliseo Planes Mora y Joaquina Cortés Garrigós, quienes no tenían relación con el mundo artístico.
Desde pequeño mostró inclinación por la música, participando como corista en su colegio.
En los años sesenta formó parte del grupo pop “Los Días”, donde interpretaban covers de bandas como The Beatles y el Dúo Dinámico, además de algunas composiciones propias de Camilo.
En 1965, el grupo viajó a Madrid para participar en un concurso de Televisión Española, interpretando flamenco de Los Brincos, lo que les abrió algunas puertas.
Sin embargo, el grupo no logró consolidarse y la mayoría de sus integrantes regresaron a su ciudad, mientras Camilo decidió quedarse en Madrid.
Para sobrevivir, trabajó tocando instrumentos, haciendo coros para otros músicos y pintando.
En 1966 ingresó al grupo “Los Botines”, que luego pasó a llamarse “Camilo y Los Botines”.
Participaron en la película española “El flautista de Hamelín” y Camilo tuvo un papel destacado en “Los chicos del Preu”, una de las películas más vistas del cine español.
Desde entonces, su ambición y talento comenzaron a despegar.
En otoño de 1970 grabó su primer sencillo con los temas “Llegará el verano” y “Sin dirección”, con el que ganó el premio revelación en el Festival de los Soles de la Canción.
En 1971 lanzó su álbum debut “Algo de mí”, producido por Juan Pardo, que lo consolidó como cantante solista bajo el nombre de Camilo Sesto.
Canciones como “Lanza tu voz”, “Manuela” y “Mendigo de amor” empezaron a sonar con fuerza.
En 1972, Camilo llegó a Argentina, donde recibió su primer disco de oro y realizó giras exitosas.
Ese año editó el álbum “Solo un hombre”, con temas que se convirtieron en clásicos, como “Amor amar”, “Fresa salvaje” y “Con razón o sin razón”.
Su música cruzó fronteras y fue nominado al Grammy.
Su éxito siguió creciendo con el álbum “Algo más” en 1973, que incluyó canciones que alcanzaron los primeros puestos en ventas en todo el mundo.
En 1974 participó en el Festival de Viña del Mar, Chile, y lanzó el álbum “Camilo”, con temas que se volvieron clásicos, como “Ayúdame” e “Isabel”.
Un momento importante en su carrera fue su protagonismo en la ópera rock “Jesucristo Superstar” en 1975, que produjo y costeó completamente.
La obra fue un éxito rotundo y se mantuvo en cartel durante cuatro meses.
Durante los años setenta y ochenta, Camilo Sesto consolidó su carrera con álbumes como “Amor libre” (1975), “Rasgos” (1977) y “Sentimientos” (1978), que incluían grandes éxitos como “Jamás”, “Piel de ángel” y “Vivir así es morir de amor”.
En 1979 recibió un disco de platino por vender 13 millones de discos en todo el mundo.
Su carrera internacional incluyó presentaciones en lugares emblemáticos como el Madison Square Garden de Nueva York, donde actuó ante más de 45,000 personas.
Fue reconocido como el “Sinatra de España” y compartió escenarios con figuras como Julio Iglesias, Miguel Bosé y José Luis Rodríguez “El Puma”.
En 1981 fue el primer artista en recibir la Gaviota de Plata en el Festival de Viña del Mar, un galardón que se convirtió en símbolo del evento.
Su álbum “Más y más” (1982) incluyó temas que llegaron a los primeros puestos de popularidad.
En 1983 nació su único hijo, Camilo Michel Blanes Tornel, fruto de una relación breve con la mexicana Lourdes Ornelas.
Camilo Sesto siempre fue muy reservado con su vida privada, aunque se le atribuyeron romances con varias actrices famosas.
En 1985 publicó su autobiografía “Biografía y memorias”, donde relató sus experiencias personales y artísticas, sus amores y sus inquietudes.
A finales de los años ochenta, Camilo decidió retirarse temporalmente de la música para dedicarse a su familia y recuperarse del agotamiento acumulado tras más de 6,000 conciertos en todo el mundo.
Se trasladó a Miami y realizó actuaciones esporádicas en España.
En 1991 regresó con el álbum “A voluntad del cielo”, que incluyó éxitos como “Bienvenido amor” y “Amor mío, ¿qué me has hecho?”.
Este último se mantuvo 18 semanas consecutivas en el primer lugar de la revista Billboard y fue nominado al Grammy.
En 2001, Camilo Sesto fue sometido a un trasplante de hígado debido a una hepatitis contraída años antes, aunque el primer trasplante falló y tuvo que ser repetido en 2011.
En 2002 lanzó el álbum “Alma”, que tuvo gran aceptación, especialmente entre el público joven.
Realizó giras por América Latina y participó en el Festival de Viña del Mar en 2004, donde fue homenajeado con varios premios.
En 2008 inició su gira de despedida “Camilo Pura Vida”, que continuó con éxito en Estados Unidos, México, Venezuela y Perú.
En 2013 sufrió un robo en su chalet de Madrid, un incidente que marcó su vida personal.
El 8 de septiembre de 2019, Camilo Sesto falleció a los 73 años debido a un paro cardiorrespiratorio asociado a un fallo renal, complicaciones derivadas de su delicado estado de salud.
Su lucha contra problemas de alcoholismo y las secuelas de sus intervenciones médicas marcaron sus últimos años.
Su muerte fue un golpe para el mundo de la música y para sus millones de seguidores, quienes recuerdan con cariño y respeto a un artista que dejó una huella imborrable en la historia musical en español.
Camilo Sesto no solo fue un cantante excepcional, sino también un compositor y productor que marcó una época dorada de la música romántica.
Su voz, sus letras y su entrega en el escenario lo convirtieron en un ícono que trascendió generaciones.
Su obra sigue vigente, sus canciones son himnos del amor y la pasión, y su influencia permanece en numerosos artistas actuales.
Camilo Sesto será siempre recordado como uno de los grandes genios de la música en español, cuyo legado perdurará por siempre.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.