Bronco es una de las agrupaciones más icónicas y queridas de la música regional mexicana, reconocida por su estilo único que mezcla el norteño con elementos de la música pop.
Sin embargo, detrás del éxito y la fama, se esconde una historia de amistad rota, conflictos y polémicas que marcaron el final de una era para el grupo.
En este artículo, exploraremos el origen de Bronco, la relación entre Guadalupe “Lupe” Esparza y Ramiro Delgado, y cómo una amistad de décadas terminó en escándalo.
La historia de Bronco comienza a finales de los años 70 en Apodaca, Nuevo León, cuando un grupo de compañeros de secundaria decidió formar una banda.
José Guadalupe Esparza, conocido como Lupe, fue la voz principal y percusionista, mientras que Ramiro Delgado se unió poco después como tecladista y acordeonista, aportando un sonido característico que definiría a la agrupación.
El nombre “Bronco” fue inspirado en la gallardía e irreverencia de un potro salvaje, reflejando la energía y fuerza del grupo.
Su primer sencillo profesional, “Quiero Decirte”, se lanzó en Agua Fría, cerca de Apodaca, y aunque no fue un éxito inmediato, sentó las bases para lo que vendría después.
Fue con temas como “Sergio el Bailador” que Bronco comenzó a ganar reconocimiento, llegando incluso a obtener un disco de oro en Chicago por las altas ventas.
Durante la década de los 80, Bronco se convirtió en una banda esencial dentro del regional mexicano.
Con Ramiro Delgado como parte fundamental, el grupo lanzó varios álbumes exitosos, incluyendo “Bronco Super Bronco”, que contenía temas como “La Rompidita” y “Lo Tengo Decidido”.
Ramiro, además de su talento musical, se destacó como uno de los galanes del grupo, atrayendo la atención del público.
Sin embargo, no todo fue fácil.
Durante un concierto en La Fama, Nuevo León, siete jóvenes fallecieron y cientos resultaron heridos, un suceso que marcó profundamente al grupo.
Como homenaje, Lupe Esparza compuso “Cumbia Triste”, reflejando la tristeza y el dolor de ese momento.
A pesar de estos golpes, Bronco siguió adelante, lanzando álbumes que se convirtieron en clásicos y participando en telenovelas, como “Dos Mujeres y un Camino”, que consolidó aún más su popularidad.
A pesar del éxito, Bronco enfrentó problemas legales que afectaron su estabilidad.
En un momento crítico, perdieron temporalmente el derecho a usar su nombre debido a conflictos relacionados con la propiedad intelectual.
El nombre quedó registrado a nombre de una empresa manejada por su representante, lo que llevó a la disolución temporal del grupo.
Durante este periodo, Ramiro Delgado formó su propia banda llamada “Ramiro y Cazadores”, que luego se renombró “Ramiro y Juan”.
Aunque recibió críticas positivas y parecía tener futuro, la crisis que afectó al género grupero en los años 90 también impactó este proyecto, llevándolo a un declive.
En 2017, Bronco logró recuperar el uso de su nombre gracias a la intervención de Sony Music y el esfuerzo conjunto de Lupe Esparza, Ramiro Delgado y otros miembros.
Este hecho fue celebrado como un renacer para la agrupación, que volvió a los primeros lugares de popularidad y retomó su legado con fuerza.
Sin embargo, esta etapa también fue el inicio de una polémica que sacudiría a la banda.
En 2019, estalló un conflicto público entre Lupe Esparza y Ramiro Delgado, cuya raíz se remonta a años atrás, posiblemente desde la muerte de Javier “Choche” Villarreal en 2012, otro miembro clave del grupo.
La relación entre Lupe y Ramiro, que había sido cercana durante más de 30 años, se deterioró gravemente.
Ramiro acusó públicamente a Lupe de traición, maltrato psicológico y manejos económicos dudosos dentro del grupo.
Según Delgado, no recibió un pago justo por su trabajo y fue tratado como un empleado común, a pesar de ser uno de los miembros fundadores.
Ramiro también denunció que Lupe tenía un control desproporcionado sobre las finanzas y decisiones del grupo, dejando a los demás integrantes en desventaja.
La falta de comunicación y apoyo, especialmente cuando Ramiro enfrentó problemas de salud, agravaron aún más la situación.
Por su parte, Lupe Esparza reconoció diferencias con Ramiro, pero afirmó que su prioridad siempre fue mantener activo al grupo y que intentó mantener un ambiente positivo.
Negó las acusaciones de robo y maltrato, señalando que Ramiro quería recibir el mismo dinero que él, lo cual consideraba injusto.
Tras la salida de Ramiro de Bronco, la disputa escaló a nivel legal.
Ramiro inició demandas contra Lupe y los administradores del grupo, solicitando auditorías y el congelamiento de cuentas por supuestas irregularidades financieras.
Mientras tanto, la banda emitió comunicados afirmando que Ramiro siempre fue un invitado en las presentaciones y que se le entregó la información financiera solicitada.
El ambiente dentro de Bronco se volvió tenso, afectando incluso a la siguiente generación, ya que el hijo de Ramiro también decidió abandonar la banda para emprender una carrera en solitario debido a la presión y el clima incómodo.
A pesar de los conflictos internos, Bronco sigue siendo una de las bandas más influyentes y respetadas del regional mexicano.
Su música ha trascendido generaciones con éxitos como “Adoro”, “Que No Quede Huella” y “Dos Mujeres y un Camino”.
Además, su imagen y estilo, con cabelleras largas, bigotes y botas vaqueras, se convirtieron en un ícono cultural.
Bronco también incursionó en cine, televisión y hasta historietas, consolidándose como una marca que generó miles de dólares y un impacto duradero en la cultura popular.
El conflicto entre Lupe Esparza y Ramiro Delgado es un recordatorio de que incluso las amistades más sólidas pueden fracturarse por diferencias personales y profesionales.
La historia de Bronco no solo es una saga de éxito musical, sino también de luchas internas, decisiones difíciles y la complejidad de mantener un grupo unido en el tiempo.
Mientras algunos fans lamentan la ruptura, otros esperan que algún día pueda haber una reconciliación.
Por ahora, la historia queda como un capítulo oscuro en la trayectoria de una banda que, pese a todo, sigue siendo un referente en la música regional mexicana.
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