Enrique Iglesias revela la reacción de sus hijos al ver sus escenas íntimas con Anna Kournikova
A lo largo de su carrera, Enrique Iglesias ha protagonizado algunos de los videoclips más sensuales y recordados de la música latina.
Desde Escape hasta Tonight (I’m Lovin’ You), sus escenas íntimas han sido parte esencial de su imagen artística.
Sin embargo, el tiempo ha pasado, y hoy, el cantante no solo es una superestrella internacional, sino también padre de tres hijos.
Por eso, en una reciente entrevista, Enrique sorprendió al hablar con total franqueza sobre cómo reaccionan sus pequeños al ver sus escenas románticas, en especial las que comparte con su pareja de toda la vida, Anna Kournikova.
Entre risas, Enrique confesó que sus hijos —los mellizos Lucy y Nicholas, de 7 años, y la pequeña
Mary, de 4— ya han comenzado a ver fragmentos de sus videoclips, y algunos no pasan desapercibidos.
“Lo más gracioso es cuando ven el video de Escape.
Se quedan mirándome con cara de ‘¿Papá, qué estás haciendo con mamá?'”, contó el cantante, sin ocultar su sonrisa.
“Y claro, les causa mucha risa, porque no entienden del todo lo que están viendo, pero sí notan que hay besos, abrazos, y miradas intensas”, añadió.
El videoclip de Escape, lanzado en 2001, fue el primer proyecto en el que Enrique y Anna trabajaron juntos, y también donde surgió la chispa que dio inicio a su relación.
En esas imágenes, se los ve besándose apasionadamente, en escenas que, aunque artísticas, no dejan de ser cargadas de tensión romántica.
Para sus hijos, sin embargo, todo esto parece una especie de “película graciosa” protagonizada por sus padres. “Mis hijos aún no lo ven como algo romántico.
Ellos solo dicen: ‘¡Mira a papá persiguiendo a mamá por todo el estacionamiento!’”, comentó entre carcajadas.
Enrique también reflexionó sobre cómo maneja este tipo de situaciones dentro de su hogar.
“No quiero esconderles lo que fui o lo que hago.
Creo que está bien que sepan que papá y mamá trabajaron juntos, que se enamoraron, y que antes de ser sus padres también fueron personas jóvenes con pasiones y carreras.
Claro, con cuidado, porque aún son chicos, pero con naturalidad”, explicó.
Aunque la mayoría de los niños de su edad tal vez no tengan acceso a este tipo de contenidos de sus padres, en el caso de los hijos de Enrique y Anna, la realidad es diferente.
Crecen con la herencia artística de dos íconos: un cantante de fama mundial y una extenista que fue reconocida tanto por su talento como por su imagen.
Y aunque sus padres han intentado mantenerlos alejados de los focos, poco a poco empiezan a descubrir ese mundo mediático que los rodea.
“Es inevitable”, admite Enrique.
“Van creciendo y se vuelven más curiosos. Nos han visto en televisión, nos han buscado en YouTube, y claro, hacen preguntas. Yo prefiero responderlas con honestidad, sin rodeos pero con sensibilidad”.
También reconoce que algunas escenas pueden parecer un poco incómodas, pero afirma que su enfoque ha sido siempre enseñar con normalidad y cariño.
Anna Kournikova, por su parte, también se ha tomado con humor este tipo de situaciones.
Según Enrique, ella suele bromear cuando los niños se asombran por alguna escena.
“Anna se ríe y dice ‘bueno, así empezó todo’.
Ellos no lo entienden completamente, pero creo que con el tiempo lo verán como una parte bonita de nuestra historia”, expresó.
La pareja ha sido muy cuidadosa al criar a sus hijos en un ambiente de estabilidad y amor, manteniéndolos al margen del espectáculo.
Por eso, momentos como estos sirven para fortalecer ese vínculo basado en la confianza.
“No queremos que piensen que deben avergonzarse de nada”, agregó Enrique.
“El amor no es algo que se esconde. Al contrario, ellos son el resultado de ese amor que se ve en el video”.
Más allá de lo anecdótico, las palabras de Enrique reflejan una forma moderna y abierta de ver la paternidad.
En un mundo donde las figuras públicas suelen construir una imagen cuidadosamente controlada, él elige mostrarse tal cual es: un artista, sí, pero también un padre sensible, divertido y profundamente involucrado en la educación emocional de sus hijos.
Con una carrera consolidada, una familia estable y una relación que ha resistido el paso del tiempo, Enrique Iglesias parece haber encontrado el equilibrio perfecto entre la fama y la vida real.
Y aunque sus videoclips sigan generando suspiros en el público, en su hogar, lo que importa es la risa de sus hijos al ver a “papá y mamá actuando raro en la tele”.
Porque al final del día, para Enrique, el mayor escenario ya no es el estadio lleno de fans.
Es su sala, con tres niños curiosos y felices, descubriendo quiénes son sus padres… y riéndose de sus besos en la pantalla.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.