🧨 “No podía seguir callando”: Pato Machete DESTAPA la verdad que ocultó por décadas

Pato Machete, exintegrante del legendario grupo Control Machete y pionero del rap latinoamericano, reapareció públicamente esta semana en una entrevista exclusiva que está haciendo temblar los cimientos del mundo musical.

No fue para promocionar un disco, ni para anunciar una gira.

Fue para hablar… de lo que nunca habló.

A los 58 años, decidió dejar el micrófono y tomar la palabra como hombre, como ser humano… y lo que dijo no dejó a nadie indiferente.

Con voz pausada, mirada firme y sin rodeos, Pato comenzó con una frase que ya anticipaba lo fuerte de lo que venía: “He callado por respeto, por miedo y por orgullo… pero ya no más.

” Lo que vino después fue una narración descarnada sobre los años más oscuros de su vida: adicciones, traiciones dentro de la industria, batallas internas que lo llevaron al borde del colapso.

Reveló que durante la cúspide del éxito con Control Machete, vivía en una espiral de caos, lejos de la imagen de artista consciente y revolucionario que muchos idolatraban.

Contó que llegó a depender del alcohol y otras sustancias para poder subirse al escenario, y que incluso hubo conciertos que no recuerda haber dado.

“No era yo.

Era una versión destruida de mí mismo disfrazada de estrella del rap.

” Su confesión incluye noches de hotel en blanco, amistades rotas por culpa de su ego y decisiones que, según él mismo, aún lo atormentan.

Pero lo más estremecedor fue cuando habló de la traición de gente de su círculo más íntimo.

Sin dar nombres, mencionó que fue utilizado, manipulado y silenciado por intereses comerciales que buscaban exprimir su imagen, sin importar las consecuencias personales.

“Mientras yo me estaba muriendo por dentro, otros contaban el dinero que generaba mi nombre”, dijo.

La entrevista dio un giro aún más profundo cuando reveló que estuvo a punto de abandonar la música definitivamente.

“Hubo una noche en la que toqué fondo.

No voy a decir dónde ni cómo, pero esa noche pensé que no iba a despertar.

” Fue gracias a su familia —y especialmente a su hija— que logró salir de esa oscuridad.

“Ella me vio con los ojos llenos de decepción… y eso me salvó.

Desde entonces, Pato Machete ha estado en un proceso de reconstrucción.

Reconectó con la música desde un lugar más íntimo, alejado del ruido comercial, y dedicó tiempo a ayudar a jóvenes artistas a no cometer los mismos errores.

Ha visitado centros de rehabilitación, cárceles, y comunidades marginadas, compartiendo su historia sin filtros.

“No soy un ejemplo de perfección, pero sí de que se puede volver de los infiernos.

En medio de esta confesión pública, también lanzó una bomba: está escribiendo un libro donde contará todo, sin censura.

Desde los inicios de Control Machete, las tensiones internas con sus compañeros, hasta los episodios más oscuros de su vida personal.

“Será mi despedida, o tal vez mi redención”, dijo.

Las reacciones no se hicieron esperar.

Artistas como Residente, Molotov y hasta B-Real de Cypress Hill expresaron su respeto por la valentía de Pato.

Las redes estallaron en mensajes de apoyo, agradecimiento y sorpresa: “Ahora entiendo muchas cosas”, “Qué fuerte historia, gracias por compartirla”, “Eres más grande por atreverte a hablar”.

Lo que ha hecho Pato Machete no es solo contar su historia.

Es abrir una puerta a la reflexión dentro de una industria que muchas veces exige imagen perfecta y silencio ante el dolor.

Su testimonio es un grito de verdad que muchos necesitaban oír… aunque no estuvieran preparados para hacerlo.

Hoy, a sus 58 años, Pato no busca aplausos.

Busca paz.

Y con su confesión, más que shockear, ha logrado algo más poderoso: inspirar.

Porque hay silencios que duelen… y otros que liberan cuando, por fin, se rompen.