La última exposición del artista santandereano mostrará las interacciones entre lo abstracto, lo concreto y lo tridimensional, a partir de su tradicional estilo geométrico. La demostración está disponible hasta el 30 de septiembre en la galería Alonso Garcés.
Jorge Riveros destaca en sus obras el número áureo como un principio matemático y estético.
Foto: Cortesía
Platón se expresaba: “Ahora advierto cuan preciosa es esta ciencia del cálculo y cuan útil al objeto que nos proponemos cuando se la estudia en sí misma (…), por consiguiente, la geometría atrae al alma hacia la verdad, forma en ella el espíritu filosófico y la obliga a dirigir a lo alto sus miradas….”
Así, el maestro Jorge Riveros encuentra inspiración en la rigurosidad de la geometría transformada sensiblemente a través de la imaginación, creatividad, abstracción, y precisión en obras que amplían los horizontes de la abstracción geométrica en el siglo XXI, y que además, se ve reflejado en su última exposición “Una vida más allá de la geometría”.
La geometría expresada en el arte requiere de conocimientos en multiplicidad de disciplinas, leyes de forma, luz, color y fundamentalmente de una matemática que interactúa entre lo abstracto y lo concreto.
Son años de investigación, de creaciones que se debaten incesantemente entre el error y el acierto, hasta que se alcanza el balance preciso en el que la abstracción manifestada dentro de la complejidad de la geometría se expresa con la naturalidad de la naturaleza misma. Cada trazo, textura, composición y forma respiran de la mano dirigida ecuánimemente por ambos hemisferios, el objetivo y analítico en paralelo unísono al subjetivo e intuitivo.
El arte siempre cumple objetivos, y en las obras de Jorge Riveros, las interacciones entre lo abstracto, lo concreto y lo tridimensional amplían los límites de la percepción al espectador, e invitan a reflexionar sobre los orígenes y alcances de la geometría, de su universalidad como lenguaje y su capacidad de evocar lo sublime y despertar el asombro en el arte.
Su obra es simbólica, mensajes crípticos de luz, forma y color; un legado a la continuidad de la abstracción que registra un referente universal a través de todas y cada una de sus obras.