El 29 de marzo, en un episodio exclusivo de Despierta América, Abraham Quintanilla, el padre de la icónica Selena Quintanilla, se sentó a charlar con la periodista María Antonieta Collins en un museo que alberga los recuerdos más preciados de su hija, casi tres décadas después de su trágica partida.
Este encuentro no solo fue un viaje nostálgico a través de la vida de Selena, sino también una oportunidad para que Abraham compartiera sus reflexiones sobre el legado de su hija y las circunstancias que rodearon su vida y muerte.

Recuerdos que perduran
Durante la conversación, Abraham rememoró momentos significativos de la vida de Selena, desde sus primeros pasos en la música hasta su ascenso meteórico como “La Reina del Tex-Mex”.
Cada recuerdo que compartió estaba impregnado de amor y melancolía, revelando no solo la relación familiar, sino también el impacto que Selena tuvo en la cultura latina.
Abraham enfatizó la importancia de mantener viva la memoria de su hija, no solo a través de su música, sino también a través de historias que continúan inspirando a nuevas generaciones.
Recordó cómo Selena comenzó su carrera a una edad temprana, cantando en pequeñas presentaciones y cómo su talento natural la llevó a convertirse en un fenómeno mundial.
El legado musical de Selena sigue resonando hoy en día, y su influencia se siente en muchos artistas contemporáneos que la citan como una fuente de inspiración.
Reflexiones sobre Yolanda Saldívar
Uno de los momentos más impactantes de la entrevista fue cuando Abraham habló sobre Yolanda Saldívar, la mujer que le quitó la vida a Selena en 1995.
Con un tono de tristeza y resignación, Abraham expresó su deseo de justicia y su esperanza de que la verdad sobre lo que ocurrió ese fatídico día finalmente saliera a la luz.
“No hay un día que pase sin que piense en ella”, comentó, refiriéndose a su hija, y sus palabras reflejaron el dolor que aún siente por la pérdida.
Este tema, aunque doloroso, es crucial para entender la historia de Selena y el legado que dejó atrás.
Abraham compartió que, a pesar del tiempo que ha pasado, el dolor de perder a su hija nunca se desvanece, y siempre habrá preguntas sin responder sobre lo que pudo haber sido su vida.

Un deseo de reencuentro
Abraham también compartió su anhelo de un reencuentro con Selena, un deseo que resuena profundamente en muchos de sus seguidores.
“Si pudiera tener un momento más con ella, le diría cuánto la amo y cuánto la extraño”, dijo con lágrimas en los ojos.
Este deseo de conexión no solo es un reflejo del amor de un padre por su hija, sino que también resuena con aquellos que han perdido a seres queridos y anhelan la oportunidad de volver a verlos.
La tristeza de la pérdida se mezcla con la esperanza de que, de alguna manera, Selena todavía vive en los corazones de sus fans y en su música.
Este sentimiento de anhelo es algo que muchos pueden entender, y es una parte fundamental de la experiencia humana.
El restaurante favorito de Selena
Durante la entrevista, María Antonieta llevó a Abraham a un restaurante que fue el favorito de Selena y su familia.
Este lugar, lleno de recuerdos, se convirtió en un punto de encuentro donde la familia Quintanilla solía disfrutar de momentos juntos.
Abraham describió cómo la comida y el ambiente de este restaurante evocaban memorias de felicidad y unión familiar.
“Cada plato tiene una historia”, comentó, resaltando la importancia de la comida en su cultura y en su vida familiar.
Los sabores y aromas del restaurante no solo traen recuerdos de la infancia de Selena, sino que también simbolizan la unión familiar que siempre fue fundamental en su vida.
Este tipo de experiencias compartidas son esenciales para mantener viva la memoria de aquellos que hemos perdido.

Un legado que trasciende el tiempo
El legado de Selena Quintanilla sigue vivo a través de su música y el impacto cultural que ha tenido en la comunidad latina.
Abraham enfatizó la necesidad de seguir celebrando su vida y su obra, no solo en el ámbito musical, sino también en el corazón de quienes la amaron.
“Selena no solo fue una cantante, fue un símbolo de unidad y orgullo para nuestra comunidad”, afirmó con convicción.
La influencia de Selena se siente en la música contemporánea, donde muchos artistas citan su trabajo como una fuente de inspiración.
Su estilo y su voz han dejado una huella indeleble en la industria musical, y su legado continúa inspirando a nuevas generaciones de músicos.
La conversación entre Abraham y María Antonieta subraya la relevancia de recordar a Selena no solo como una estrella, sino como una persona que tocó vidas y dejó una huella imborrable en el mundo.
Conclusión
El encuentro entre Abraham Quintanilla y María Antonieta Collins en Despierta América fue un recordatorio conmovedor del impacto que Selena sigue teniendo en la cultura latina.
A través de sus recuerdos, reflexiones y anhelos, Abraham mantiene viva la memoria de su hija, asegurando que su legado perdure en el tiempo.
La historia de Selena es un testimonio de amor, pérdida y la eterna búsqueda de justicia y verdad.

Este tipo de conversaciones son esenciales para recordar que, aunque Selena ya no esté físicamente con nosotros, su espíritu y su música continúan viviendo en los corazones de millones.
La historia de su vida y su trágica muerte son recordatorios de la fragilidad de la vida, pero también de la belleza que puede surgir de ella.
Selena Quintanilla es más que una artista; es un símbolo de esperanza, amor y unidad que seguirá inspirando a generaciones futuras.