Colombia est谩 de luto tras la tr谩gica partida del senador y candidato presidencial Miguel Uribe Turbay, quien falleci贸 el pasado 11 de agosto de 2025 a los 39 a帽os en la cl铆nica Fundaci贸n Santa Fe de Bogot谩.
Su muerte no solo marca el fin de una prometedora carrera pol铆tica, sino que revive las profundas heridas de un pa铆s que ha sido golpeado por la violencia durante d茅cadas.

Miguel Uribe Turbay, nieto del expresidente Julio C茅sar Turbay Ayala e hijo de la periodista Diana Turbay, creci贸 bajo la sombra de un legado pol铆tico y personal marcado por la tragedia.
Su madre, Diana Turbay, perdi贸 la vida en 1991 a manos de la violencia, cuando Miguel apenas ten铆a 4 a帽os.
En su discurso pol铆tico, Miguel sol铆a recordar este doloroso episodio como un motor para luchar por un pa铆s m谩s seguro y justo.
“Soy Miguel Uri y la violencia me quit贸 a mi mam谩, Diana Turbay, cuando yo ten铆a 4 a帽os.
Hace 35 a帽os se despidi贸 de m铆 y nunca regres贸.
Vamos a trabajar para proteger a las familias colombianas y que ning煤n hijo tenga que volver a llorar a una madre o una madre tenga que volver a llorar a uno”, dijo en una de sus 煤ltimas intervenciones p煤blicas, dejando claro que su lucha estaba profundamente arraigada en su historia personal.
El atentado que cambi贸 su vida ocurri贸 el pasado 7 de junio de 2025, durante un mitin pol铆tico en Bogot谩.
Lo que deb铆a ser un encuentro con ciudadanos para exponer sus propuestas se convirti贸 en una tragedia cuando un joven armado logr贸 acercarse lo suficiente para atacarlo.
El disparo le caus贸 un edema cerebral severo, obligando a los m茅dicos a realizar m煤ltiples cirug铆as en un esfuerzo por salvar su vida.

Desde ese d铆a, Miguel permaneci贸 en estado cr铆tico, mientras su esposa, Mar铆a Claudia Tarazona, se convirti贸 en un s铆mbolo de fortaleza y amor.
Mar铆a Claudia estuvo a su lado d铆a y noche, aferrada a la fe y a la esperanza de verlo despertar.
“Con una sonrisa puedo decirles que Miguel sigue luchando por su vida, aferrado a nosotros, a su hijo, a las ni帽as y a cada uno de ustedes”, expres贸 en su momento, mostrando la resiliencia que caracteriz贸 a la familia durante la dura batalla.
Sin embargo, la madrugada del 11 de agosto, el pa铆s recibi贸 la noticia que nadie quer铆a escuchar.
A las 1:56 de la ma帽ana, Miguel Uribe Turbay falleci贸, dejando un vac铆o profundo en la pol铆tica colombiana y en los corazones de quienes lo conocieron.
La Alcald铆a de Bogot谩 decret贸 tres d铆as de duelo oficial, y m煤ltiples l铆deres pol铆ticos, tanto afines como opositores, expresaron su pesar y condenaron el crimen.
Figuras internacionales tambi茅n se sumaron a las muestras de solidaridad, se帽alando la urgencia de combatir la violencia pol铆tica que persiste en Colombia.
En redes sociales, miles de ciudadanos compartieron mensajes, fotos y videos recordando a Miguel, destacando su cercan铆a con la gente y su firmeza en los debates.

Miguel Uribe Turbay deja un legado de compromiso y valent铆a.
A pesar de las adversidades, logr贸 forjar su propio camino en la vida p煤blica, siendo concejal de Bogot谩, secretario de gobierno de la capital y m谩s tarde senador de la Rep煤blica.
En su discurso pol铆tico, defend铆a con firmeza la seguridad ciudadana, el fortalecimiento de las instituciones y el respeto a la democracia, posicion谩ndose como una de las figuras emergentes m谩s visibles de la oposici贸n al gobierno actual.
Su muerte revive en la memoria colectiva momentos oscuros de la historia reciente de Colombia, un pa铆s que ha pagado un alto precio por la violencia.
La partida de Miguel deja a una familia rota, a una esposa que luch贸 hasta el final a su lado, y a un pa铆s que entre l谩grimas vuelve a preguntarse cu谩nto m谩s deber谩 pagar por la violencia que no termina.
La historia de Miguel Uribe Turbay es un recordatorio de los costos humanos de la violencia y de la importancia de trabajar por un pa铆s donde las diferencias se resuelvan con di谩logo y no con armas.
Su legado vive en su familia, en sus seguidores y en las ideas que defendi贸 con pasi贸n hasta el 煤ltimo d铆a.
Hoy, Colombia despide a Miguel Uribe Turbay, pero su lucha y su mensaje seguir谩n siendo una luz en medio de la oscuridad.
Como 茅l mismo dijo: “Vamos a trabajar para proteger a las familias colombianas y que ning煤n hijo tenga que volver a llorar a una madre o una madre tenga que volver a llorar a uno”.
Que su partida sea un llamado a la paz y a la uni贸n de un pa铆s que tanto lo necesita.