🔥Llega el HEREDERO de Rubby Pérez en una LAMBORGHINI de 24 millones y REVIENTA la calma familiar💥 ¡Mira lo que pasó!
A plena luz del día, mientras la mayoría de la familia aún digería la pérdida de uno de los íconos más grandes del merengue, la escena se volvió surrealista.
Desde la distancia ya se escuchaba el rugido del motor de la Lamborghini Urus, un vehículo que pocos dominicanos pueden siquiera ver de cerca en su vida.
Y junto a ella, una Ranch Robert 2024, tan exclusiva como costosa, avanzaba lentamente hacia la antigua residencia del inolvidable Rubby Pérez.
Dentro, al volante, nada menos que su hijo varón.
Con rostro serio, lentes oscuros y sin emitir una sola palabra, estacionó ambos vehículos frente a la mirada atónita de familiares, vecinos y trabajadores domésticos.
Lo que ocurrió a continuación fue casi cinematográfico.
El joven descendió con seguridad y entró directamente a la vivienda.
No pidió permiso.
No tocó la puerta.
No saludó.
Lo suyo era un acto de presencia, un movimiento estratégico que decía más que mil palabras: esos carros ya no pertenecen al fallecido artista, ahora son suyos.
Aunque nadie en voz alta lo cuestionó, la tensión en el aire era espesa como concreto.
Algunos lo observaron con respeto, otros con desconfianza, pero todos comprendieron lo mismo: la pelea por la fortuna de Rubby acababa de comenzar.
El valor combinado de los dos vehículos es escandaloso: 34 millones de pesos dominicanos.
Solo la Lamborghini Urus, un símbolo de estatus reservado para millonarios y celebridades, alcanza los 24 millones.
La Ranch Robert, con detalles únicos y blindaje especial, bordea los 10 millones.
Pero más allá del dinero, lo que representan estos automóviles es poder.
Poder dentro de una familia donde la herencia no solo se mide en bienes, sino también en legado, visibilidad y protagonismo mediático.
Mientras esto ocurría, las hijas de Rubby Pérez también hacían sus movimientos.
Su hija Solinka, conocida por su cercanía al mundo artístico, anunció oficialmente la creación de la orquesta “Los Hijos de Rubby”.
Una jugada maestra.
Bajo la bandera del apellido del merenguero, no solo buscan mantener viva la memoria del padre, sino también posicionarse como los herederos naturales de su imperio musical.
Conciertos, entrevistas, presentaciones…
Todo apunta a que la herencia no solo se disputa en bienes físicos, sino en la marca, el nombre, la leyenda misma.
Pero, ¿qué tan en paz estaba la familia realmente antes de este episodio? Según fuentes cercanas, desde el fallecimiento del artista, las conversaciones sobre la herencia han sido tensas y cargadas de recelos.
Aunque no ha trascendido ninguna demanda legal, ya hay abogados de por medio y reuniones privadas con notarios.
Algunos familiares consideran que el hijo varón actuó de forma apresurada y hasta irrespetuosa al tomar posesión de los vehículos sin una asignación oficial.
Otros, en cambio, lo defienden argumentando que esos carros eran usados exclusivamente por él y que su padre se los habría prometido en vida.
La división emocional dentro de la familia es palpable.
En redes sociales, los fanáticos del merenguero también se han dividido.
Mientras algunos aplauden la decisión del hijo por tomar lo que considera suyo, otros lo critican por actuar sin tacto y ensombrecer el duelo familiar con lujos y ostentación.
Hay quienes incluso señalan que la disputa podría afectar la imagen de la familia Pérez ante el público, justo cuando se intenta honrar el legado del artista.
Más allá del escándalo mediático, hay detalles que hacen aún más compleja la situación.
Se dice que Rubby Pérez no dejó un testamento claro, lo que abre la puerta a interpretaciones, reclamos cruzados y una eventual batalla legal de proporciones épicas.
En juego no solo están los vehículos, sino también propiedades inmobiliarias, derechos de autor por su música, regalías, cuentas bancarias y objetos personales de alto valor simbólico.
Uno de los allegados a la familia aseguró que “lo que pasó hoy fue solo el comienzo”.
Según esta fuente, algunos hermanos están considerando impugnar cualquier acción que se haya hecho sin el aval legal correspondiente.
Además, habría documentos firmados por Rubby Pérez que aún no han sido revelados y que podrían cambiar totalmente el escenario de la repartición.
Mientras tanto, los medios no sueltan el caso.
Programas de farándula, periodistas de espectáculos y canales de YouTube ya lo han convertido en tema central.
Y no es para menos: la combinación de drama familiar, lujo extremo, legado artístico y millones de pesos es simplemente irresistible.
Lo cierto es que el capítulo de hoy ha dejado claro que la calma en la casa Pérez es solo superficial.
Debajo, hay tensiones acumuladas, intereses encontrados y una carrera silenciosa para ver quién logra quedarse con la mayor parte del legado de uno de los grandes del merengue.
¿Será este hijo el primero en marcar territorio o el que encendió la chispa de una guerra familiar sin retorno? Solo el tiempo lo dirá…
pero lo que ya es seguro es que esto apenas comienza.
