La partida de una gigante: la abuela de Miguel Uribe y su legado que trasciende generaciones
En las primeras horas del lunes 30 de junio, se confirmó el fallecimiento de Nidia Quintero de Turbay, abuela del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay.
A sus 93 años, Nidia no resistió una afección respiratoria que la llevó a ser hospitalizada el viernes 27 de junio en la Fundación Santa Fe.
La noticia de su partida fue recibida con profundo pesar por familiares, amigos y seguidores que reconocen en ella una figura emblemática de la solidaridad y el compromiso social en Colombia.
Entre las primeras reacciones se destacaron las sentidas palabras de María Carolina Bollos, hermana del senador, quien utilizó sus redes sociales para expresar el dolor y el amor que siente por la mujer que fue su abuela y figura maternal.
En un emotivo mensaje publicado en Instagram, María Carolina comenzó diciendo: “Mamita huela al acto y en paz, hoy el cielo recibe a una gigante, a la dama de la solidaridad.
Gracias por ser mi mamá de la vida, mi refugio cuando perdí a la mía.”
Estas palabras reflejan la profunda conexión familiar y el rol fundamental que Nidia desempeñó en la vida de sus nietos y seres queridos.
La nieta de Nidia también se sumó a la despedida con un mensaje lleno de esperanza y fe: “Dale un abrazo a mi mamá, qué consuelo saber que ahora están juntas Diana y tú, dos almas unidas, dos guardianes desde el cielo intercediendo por el milagro de mi hermano Miguel.
Intercede para que llegue pronto completo, perfecto.
Estamos esperando este milagro con la fe intacta.”
Estas expresiones no solo muestran el dolor de la familia, sino también una profunda creencia en la continuidad del amor y la protección espiritual que Nidia seguirá brindando desde el cielo.
La publicación finalizó con un reconocimiento al legado que la dama de la solidaridad deja: “Descansa en paz, mami, tu misión fue cumplida con amor.
Nos dejas un legado vivo: hacer el bien, vivir con fe y transformar desde los valores.
¡Que viva la Fundación Solidaridad por Colombia!”
Por otro lado, María Claudia Tarazona, esposa del senador Miguel Uribe, también expresó su tristeza y admiración por la abuela.
En sus palabras, destacó que Nidia Quintero partió dejando a Colombia un lugar mejor, sembrando propósito y luz con su vida dedicada al servicio social.
“El ejemplo de doña Nidia seguirá vivo entre nosotros y será la guía para Miguel, quien honra en cada acto el legado de su abuela,” afirmó María Claudia, mostrando la importancia de esta mujer como inspiración para las nuevas generaciones y para el trabajo político y social de su familia.
La despedida de Nidia Quintero se hace con un dolor infinito, pero también con un orgullo inmenso por la huella imborrable que dejó.
Fue una mujer que cambió la historia de Colombia desde la solidaridad y el compromiso con los más vulnerables.
Nidia Quintero de Turbay nació el 22 de octubre de 1931 en Neiva, hija de Jorge Quintero Céspedes y Adali Turbay.
Desde muy joven, su vida estuvo marcada por un fuerte sentido de servicio hacia los demás.
Acompañó a su madre en actividades de ayuda a poblaciones afectadas por desastres naturales, como inundaciones, lo que sembró en ella el compromiso social que mantuvo durante toda su vida.
Su trabajo como gestora social fue fundamental para asistir a comunidades vulnerables y víctimas de tragedias en Colombia.
Fue reconocida nacionalmente por su dedicación y por fundar la “Fundación Solidaridad por Colombia”, que ha impactado positivamente a miles de personas.
La noticia del fallecimiento de Nidia Quintero ha generado una ola de condolencias de diferentes sectores de la sociedad colombiana, quienes valoran su legado y su ejemplo de vida.
Su historia es un recordatorio de la importancia de la solidaridad y el compromiso social en la construcción de un país más justo y humano.
Para la familia Uribe Turbay, la partida de Nidia es un momento de tristeza profunda, pero también de reafirmación de los valores que ella inculcó.
Miguel Uribe, como senador y precandidato presidencial, continúa inspirándose en el ejemplo de su abuela para llevar adelante su labor pública con integridad y dedicación.
En medio del duelo, la familia ha encontrado consuelo en la fe y en la certeza de que el legado de Nidia seguirá vivo en cada acción que emprendan en su nombre.
La Fundación Solidaridad por Colombia, que ella creó, continúa siendo un faro de esperanza para quienes más lo necesitan.
Así, la historia de Nidia Quintero de Turbay no termina con su partida física, sino que trasciende en las vidas que tocó y en la inspiración que dejó para futuras generaciones.
Su vida es un testimonio de cómo una persona puede transformar su entorno a través del amor, la entrega y la solidaridad.
En estos momentos de despedida, la familia Uribe invita a todos a honrar su memoria continuando su obra y manteniendo vivos sus valores.
La dama de la solidaridad se ha ido, pero su luz seguirá iluminando el camino de muchos colombianos.
La muerte de Nidia Quintero es una pérdida irreparable, pero también una oportunidad para reflexionar sobre el poder de la solidaridad y el compromiso social.
Su ejemplo es un llamado a actuar con amor y a construir un país mejor para todos.
Con un legado tan poderoso, la abuela de Miguel Uribe se convierte en un símbolo de esperanza y humanidad que permanecerá en el corazón de Colombia por siempre.