Rodner Figueroa a los 53 años: La confesión que nadie esperaba — “Después de ser echado de todos lados, ¿por fin dice la verdad?”
Rodner Figueroa es un nombre que resuena en el mundo del entretenimiento latino, pero no siempre por razones positivas.
Su carrera ha estado marcada por altibajos, polémicas y enfrentamientos públicos que lo han puesto en el ojo del huracán más de una vez.
Sin embargo, detrás del glamour de la alfombra roja y la sonrisa lista para la cámara, existe un hombre con una historia compleja y llena de matices.
Nacido el 9 de abril de 1972 en Caracas, Venezuela, Rodner creció en un entorno familiar acomodado donde la disciplina y la educación eran valores fundamentales.
Su madre, jueza superior, y su padre, contador público, inculcaron en él la importancia del esfuerzo y la ambición.
Desde pequeño, fue educado en el prestigioso colegio jesuita San Ignacio de Loyola, conocido por su rigor académico y disciplina estricta.
Más allá de los libros, Rodner fue alentado a explorar diversas actividades: canto, equitación, idiomas, música y hasta ajedrez.
Su padre creía que un conocimiento amplio lo prepararía para cualquier desafío, mientras que su madre fomentaba su lado artístico y estético.
Fue ella quien despertó en él la pasión por la moda, observando cómo se preparaba cada día con elegancia y precisión.
A los cinco años, Rodner ya mostraba confianza al vestirse solo, un símbolo temprano de su independencia y personalidad.
Tras completar la secundaria, Rodner se trasladó a Florida para estudiar comunicación social.
Desde joven, su carisma natural lo llevó a destacar en eventos sociales y a desarrollar un don para hablar en público.
Su gran oportunidad llegó cuando se convirtió en copresentador del programa “Sal y Pimienta”, donde sus críticas de moda, directas y mordaces, le ganaron fama y seguidores.
Sin embargo, su carrera no estuvo exenta de controversias.
En 2015, un comentario desafortunado sobre la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, durante un segmento televisivo, desató una ola de indignación.
Rodner sugirió que la primera dama podría formar parte del elenco de “El planeta de los simios”, un comentario que fue percibido como racista y deshumanizante.
La reacción fue inmediata y severa.
Univisión, cadena para la que trabajaba desde hacía 17 años, decidió despedirlo de manera fulminante.
A pesar de sus disculpas públicas y una carta formal dirigida a Michelle Obama, la cadena mantuvo su decisión.
Este episodio marcó un antes y un después en la carrera de Rodner, quien también perdió patrocinadores y enfrentó críticas intensas en redes sociales.
No obstante, el apoyo del público no tardó en llegar.
Muchos seguidores le enviaron mensajes de aliento, reconociendo su talento y lamentando la dureza de la situación.
Rodner aprovechó ese respaldo para reinventarse, dedicándose a la meditación, el ejercicio y los viajes, y regresando poco después a la televisión con un enfoque más maduro y reflexivo.
Su regreso se concretó en Telemundo en 2017, donde recuperó parte de su brillo junto a colegas como María Celeste Arrarás.
Sin embargo, la estabilidad no duró mucho.
En 2022, fue despedido nuevamente en medio de una reestructuración de la cadena.
A pesar de ello, Rodner no se rindió y canalizó su energía hacia proyectos personales, incluyendo una línea de ropa, una marca de café y su podcast “Face to Face with Rodner Figueroa”, donde invita a artistas a conversaciones sin filtros.
En el plano personal, Rodner ha sido abierto sobre su sexualidad y su relación con Ernesto Masis, arquitecto y diseñador salvadoreño.
Su historia de amor, iniciada en 2013, ha sido un pilar fundamental en su vida.
Ernesto ha estado a su lado en momentos difíciles, como la pérdida de sus padres y las crisis profesionales.
Para Rodner, la pareja representa equilibrio, respeto y amor incondicional.
A pesar de su éxito y su independencia económica, Rodner ha sido crítico con la industria televisiva actual.
En 2025, en su podcast, expresó su frustración por la creciente presencia de influencers sin preparación en la televisión tradicional, comentarios que provocaron un enfrentamiento mediático con la cantante dominicana Chiqui Bombom.
Ella lo acusó de hipocresía y recordó sus propios tropiezos en la industria.
Rodner, sin embargo, mantiene firme su postura sobre la importancia de la profesionalización en los medios, mientras continúa explorando nuevas formas de expresión y conexión con su audiencia.
A sus 53 años, ha dejado atrás la necesidad de complacer a ejecutivos o seguir modas, abrazando una autenticidad que se refleja en su estilo, sus proyectos y su vida personal.
La confesión reciente de Rodner, que ha reavivado viejos rumores, es un paso más en su proceso de transparencia y autoaceptación.
No se trata solo de revelar secretos, sino de mostrar que detrás de la figura pública hay un ser humano con fortalezas, debilidades y la capacidad de reinventarse.
Rodner Figueroa es mucho más que un comentarista de moda o una figura polémica.
Es un hombre que ha aprendido a convivir con sus errores, a valorar el amor verdadero y a buscar la libertad en todas sus formas.
Su historia es un recordatorio de que, a pesar de las caídas, siempre es posible levantarse y seguir adelante con dignidad y pasión.
¿Será este el inicio de una nueva etapa para Rodner, lejos de controversias y más cerca de su verdad?
El tiempo y su audiencia lo dirán, pero una cosa es segura: su voz sigue siendo una de las más auténticas y valientes en el panorama mediático latinoamericano.
