¡Escándalo en Sábados Felices! ‘Carroloco’ Confiesa su Oscuro Vicio y Pierde Todo: ‘No soy millonario, solo un hombre de negocios’ — ¿Víctima o cómplice?
Juan Guillermo Noreña Zapata, popularmente conocido como “Carroloco”, uno de los humoristas más queridos del programa “Sábados Felices”, se ha visto envuelto en un torbellino de controversias que han puesto en jaque su reputación y su vida personal.
Hace pocos días, la Fiscalía General de la Nación confirmó el embargo de cuatro propiedades a su nombre, en medio de una investigación que lo vincula con el lavado de dinero del temido Clan del Golfo.
Este anuncio sorprendió a muchos, pues “Carroloco” siempre ha sido visto como un personaje carismático y alegre, capaz de sacar sonrisas a millones de colombianos.
Sin embargo, el drama detrás de cámaras es mucho más complejo y doloroso.
Recordando una entrevista que dio en 2021 para el programa “Se Dice de Mí” de Caracol Televisión, donde abrió una ventana a su vida privada que pocos conocían, el humorista confesó que durante un tiempo estuvo atrapado en un serio problema con el juego.
Este vicio, según sus propias palabras, le trajo numerosos problemas y pérdidas económicas que afectaron profundamente su estabilidad.
“Fui un jugador al que le gustaban mucho las cartas y los dados, jugaba mucho hasta un apartamento perdí”, confesó en aquella ocasión.
La situación llegó a tal punto que tuvo que vender su apartamento para intentar recuperarse, pues el juego se había convertido en una adicción que le hacía perder más de lo que ganaba.
“Era solo juegue y pierda, juegue y pierda. A veces ganaba, pero era más lo que perdía”, relató con sinceridad.
El impacto del juego en su vida fue devastador.
Según dijo, podía llegar a perder entre cinco y diez millones de pesos en una sola partida, cifras que para muchos son impensables.
Sin embargo, también aseguró que logró superar esa etapa oscura y que el juego quedó en el pasado.
“Si me invitan a jugar cartas no le veo problema, pero sin apostar dinero”, aclaró con firmeza.
Pero la polémica no termina en su confesión sobre el juego.
Frente a las recientes acusaciones y la investigación de la Fiscalía, Juan Guillermo salió a defenderse públicamente.
Negó ser millonario y rechazó cualquier vinculación con actividades ilícitas o con la red criminal del Clan del Golfo, subrayando que es inocente y que hay una intención de destruir su buen nombre.
“Conozco a Sánchez Aumada, pero siempre pensé que era un comerciante. Lo conocí como un hombre de negocios sin ningún requerimiento por la justicia. Me enteré luego de que fue capturado”, explicó el humorista, intentando despejar dudas sobre sus relaciones personales.
Además, enfatizó que su patrimonio es producto de actividades lícitas y que su matrimonio se ha formado con base en más de 30 años de trabajo honesto.
“Soy negociante, como buen arriero, pero nunca he estado involucrado en nada ilícito ni he prestado mi nombre para adquirir bienes a favor de terceros. Todo mi patrimonio es legal, lícito y declarado”, concluyó con contundencia.
Más allá de su faceta humorística, Juan Guillermo Noreña también se desempeña como empresario.
Posee una marca de café llamada “Don Sincero Café”, una cafetería, un depósito y un local comercial en San Andresito de San José, al sur de Bogotá.
Estas actividades, según él, son la base de su sustento y su imagen pública.
La confesión sobre su lucha contra el juego y la defensa ante las investigaciones han generado un intenso debate en redes sociales.
Muchos seguidores expresan su apoyo y esperanza en que pueda superar esta crisis, mientras otros se muestran escépticos y piden que se esclarezca la verdad.
Este caso pone en evidencia la complejidad de la vida pública y privada de los personajes famosos, donde la línea entre el éxito y la caída puede ser muy delgada.
También subraya la importancia de la responsabilidad y la transparencia, especialmente cuando se enfrentan acusaciones graves.
En el mundo del entretenimiento, donde la imagen lo es todo, “Carroloco” enfrenta ahora el desafío más grande de su carrera: limpiar su nombre y demostrar que su historia es de superación y no de corrupción.
Mientras tanto, el público espera con atención las próximas decisiones judiciales y las declaraciones del humorista, que ha prometido aclarar cada punto y seguir adelante con dignidad.
Esta inesperada confesión y las investigaciones que la acompañan han sacudido no solo a sus seguidores, sino a toda la farándula colombiana, recordándonos que detrás de las risas puede haber historias de lucha y también de controversia.
Solo el tiempo dirá cómo se resolverá este capítulo en la vida de Juan Guillermo Noreña Zapata, “Carroloco”.
Pero una cosa es segura: su verdad, sea cual sea, ya no puede ocultarse más.
Y como él mismo ha demostrado, en la vida real no hay guion, solo decisiones y consecuencias.
¿Será esta la caída definitiva o el renacer de un ícono del humor nacional?
El drama continúa.